Son muchas las personas que me han preguntado por redes sociales, sobre todo por Instagram, cómo elegir sartenes, o cuáles utilizo, qué marcas son recomendables, cómo cuidarlas… así que me he animado a escribir un post cortito con algunas recomendaciones y comentarios sobre las sartenes que yo utilizo.
Esta entrada contiene enlaces de afiliados. Estos enlaces te redirigen a productos que recomiendo voluntariamente de los cuales, si los compras, recibo una (muy) pequeña compensación económica. De esta forma puedo mantener el coste que tiene el blog y la creación de las recetas que publico.
Una de las preguntas que más me hacen cuando cocino por los stories de Instagram es «¿cómó haces para que la comida no se te pegue?». He de confesar que las primeras veces me sorprendió la pregunta pero, cuando ya llevaba más de 10 personas en un corto periodo de tiempo, pensé que igual hay un problema con las sartenes del que nadie habla.
La realidad es que disponer de buenos utensilios en la cocina es algo importante para mantenernos motivados a la hora de cocinar. Cuchillos afilados que cortan casi solos, amplias tablas para cortar y preparar alimentos, recipientes de cierre hermético que cierran de verdad o sartenes antiadherentes que no se pegan, hacen que nuestra experiencia en la cocina sea mucho más positiva y llevadera.
Consideraciones para elegir sartenes
Si eres de los que tienen que renovar sus sartenes casi cada año, necesitas leer este apartado. Elegir sartenes se puede convertir en un drama si no tienes en cuenta algunos aspectos. Existen muchos tipos de sartenes en el mercado, muchas de ellas con precios muy asequibles pero que duran menos que un caramelo en el patio de un colegio.
Además, el desconocimiento sobre los cuidados y usos de las sartenes hace que, a menudo, terminemos con sartenes que se pegan o a las que se les desprende la capa antiadherente, con el riesgo de que pasen materiales indeseables de la sartén a los alimentos.
Si queremos que nuestras sartenes nos duren años, o incluso toda la vida, es muy importante invertir algo de dinero y escoger sartenes de buena calidad. Yo os recomendaría que busquéis las marcas más conocidas y miréis en sus webs, o preguntéis en vuestra ferretería de confianza para que os asesoren. Las sartenes buenas vienen con instrucciones de uso y cuidado, con lo que leerlas y guardarlas es fundamental para garantizarles una vida larga.
Para los profanos, escoger una sartén puede generar numerosas dudas así que, desde mi experiencia personal, os comento algunos puntos clave que pueden ayudaros a escoger la sartén adecuada:
- Tipo de cocina: las cocinas a gas y vitrocerámica pueden utilizar el mismo tipo de sartenes y baterías, pero las de inducción necesitan utensilios especiales diseñados específicamente para este tipo de cocina (normalmente son utensilios que sirven para los tres sistemas). Por eso, si tienes inducción o piensas cambiar tu cocina a este sistema más eficiente tendrás que considerar el tipo de batería y sartenes que tienes. Consultar la etiqueta de la sartén será clave para averiguar para qué tipo de cocinas son aptas. Sin embargo, puedes saber si tus sartenes o batería sirven para inducción poniendo un imán en la base de la sartén o la olla: si éste se pega, puedes utilizarlos sin problemas en la placa de inducción.
- Número de raciones y usos: no es lo mismo cocinar para uno que para cuatro, así que aquí el tamaño (de la sartén) importa. Tampoco es lo mismo cocinar una tortilla francesa que un huevo frito o un salteado de verduras, sellar un solomillo, freír boquerones o cocinar a la parrilla. Por eso creo que tener como mínimo 2 tamaños diferentes es muy recomendable. Yo tengo 3 tamaños distintos: una de 21 cm de diámetro, para tortillas, huevos, reducir salsas o calentarme raciones individuales; otra de 24 cm para preparar raciones individuales generosas o para dos personas; y otra de 26 cm para cuando tengo gente en casa, preparo piezas grandes como pescado o hago tortillas de patatas para reuniones con amigos. También tengo una parrilla y un wok, pero la verdad es que los uso bien poco, así que no os aconsejaré sobre ellos.
- Presupuesto: algo que también es importante, puesto que una buena sartén no es barata es de cuánto presupuesto dispones. Sin embargo, dentro de la gama de sartenes de calidad siempre puedes encontrar algo que se acerque a un precio razonable. Piensa que estás haciendo una inversión en un utensilio que, si lo cuidas bien, puede durarte muchísimos años. En este caso, una sartén de gama media de las que puedes encontrar en una ferretería o tienda de cocina sería lo ideal. Si eres de los afortunados que pueden destinar más presupuesto a los menesteres culinarios, hay sartenes de gama alta de muy buena calidads que te durarán toda la vida si las cuidas bien.
- Material y recubrimientos: las sartenes buenas pueden estar hechas de hierro fundido, titanio, acero inoxidable, hierro mineral o aluminio. Algunas de ellas pueden llevar un recubrimiento antiadherente, principalmente de teflón o cerámica. Otras, sin embargo, no necesitan ese recubrimiento. Es el caso de las sartenes de acero inoxidable que suelen ser las preferidas por cocineros profesionales. A muchas personas les cuesta cocinar con este tipo de sartén porque hay que saber controlar la temperatura con la que se cocina.
Si quieres tener más detalles sobre qué tener en cuenta a la hora de comprar una sartén, puedes leer esta comparativa que hizo Eroski Consumer con 8 modelos diferentes.
Vale, pero ahórrame tiempo y dime qué sartén me compro
Me encantaría poder daros una opinión formada de cada tipo y marca de sartén, pero al final una se limita a la experiencia personal y a algunas ocasiones en las que he podido cocinar con sartenes de acero inoxidable o las de hierro fundido de Le Creuset en los cursos de cocina que he hecho.
En casa he tenido sartenes de cerámica y las clásicas antiadherentes. Cuando me mudé a Holanda cambié de gas a inducción así que tuve que renovar mis sartenes (por suerte la batería de cocina funcionaba a la perfección). Así que me compré dos sartenes de cerámica de GreenPan. Es una marca belga de muy buena calidad y, al menos en Holanda (no he visto que estén en España), ampliamente distribuida en tiendas de cocina y menaje. No terminé de hacerme con ellas ya que al poco tiempo se me pegaba la comida y al final, poco antes de dejar de usarlas definitivamente, me costaba un montón lavarlas . Ahora sé que cometí el error de meterlas en el lavavajillas varias veces y terminé fastidiándolas (os hablaré de los cuidados de las sartenes en el siguiente apartado, pero ya os adelanto: ¡jamás metáis una sartén en el lavavajillas!)
Tras la mala experiencia decidí comprarme sartenes nuevas antiadherentes para inducción en varios viajes que hice a casa (ya sabéis… como en España no se come en ningún sitio ni se encuentran sartenes buenas! 😛 ) Como he comentado más arriba, me hice con una sartén grande (26 cm) de la marca Bra y otras dos de Tefal (una pequeña de 21 cm y otra mediana de 24 cm). Supongo que al final me decidí por marcas que me resultaban familiares y había visto en casa toda la vida, no tenía ganas de volvérmela a jugar 🙂 Yo las compré por separado en una tienda de menajes y en una ferretería, pero en Amazon podéis encontrar sets de 3 tamaños por muy buen precio. Vosotros decidís.
Cómo cuidar sartenes antiadherentes
A la hora de elegir sartenes, la antiadherentes son las todoterrenos de la cocina doméstica. Necesitan un mantenimiento mínimo y son muy fáciles de limpiar. Sé que hay mucha gente reacia a este tipo de sartén, pero las primeras marcas garantizan la seguridad de sus materiales. Además, si las cuidas bien, no hay riesgo de que se liberen materiales a los alimentos.
El principal consejo para cuidar de una sartén nueva es, como siempre, leer las recomendaciones que hace el fabricante, pero aquí os dejo algunos consejos que pongo en práctica con las mías:
- Evitar cocinar con temperaturas muy altas de forma muy habitual, ya que puede dañar el recubrimiento antiadherente. Si necesitas cocinar de forma muy frecuente con altas temperaturas, entonces es mejor que te hagas con una sartén de acero inoxidable.
- Utiliza un poco de aceite. Aunque sean antiadherentes y muchos fabricantes las vendan con la alegación de que se puede cocinar sin aceite, siempre es bueno poner un pelín de grasa para facilitar el cocinado de los alimentos. Nunca uses esos sprays que se venden para moldes de repostería puesto que los aditivos que llevan son difíciles de retirar de la superficie de la sartén y terminarán estropeándola al quedar el residuo y quemarse con el calor.
- Evitar los cambios bruscos de temperatura. Cuando hayas terminado de cocinar, espera a que la sartén se enfríe antes de lavarla o ponerla en remojo. Los cambios bruscos de temperatura pueden deformar las capas internas de la sartén y hacer que el calor no se reparta uniformemente.
- Utiliza utensilios de madera o silicona, nunca metálicos ya que puedan dañar la capa antiadherente. Cuando una sartén tiene dañada la capa antiadherente se deteriora rápidamente, además de empezar a liberar compuestos de la sartén a los alimentos y lo mejor es deshacerse de ella. Hay dos cosas que me pueden sacar de quicio en una cocina: cuchillos que no cortan y sartenes desconchadas y arañadas donde se ve el material metálico con el que están hechas: ambos son un peligro para la salud.
- No almacenes alimentos en una sartén, sobre todo si tienen elementos ácidos. A la larga se puede dañar la capa antiadherente y liberar compuestos metálicos a los alimentos.
- Nunca, jamás, por mucha pereza que te dé fregar, metas una sartén antiadherente en el lavavajillas. Los detergentes que se usan son tan abrasivos que destrozan la capa antiadherente (recordad mi experiencia con las sartenes de cerámica). Lávalas siempre cuando se hayan enfriado, con un paño o esponja (nunca con esos estropajos verdes o de metal), agua tibia y un detergente suave (tu lavavajillas habitual, el de lavar a mano, no el de máquina, basta y sobra)
- Si las guardas una encima de otra pon un trozo de papel de cocina entre cada una de ellas para que no se rallen.
Y hasta aquí, el post «cortito» de tres folios sobre cómo elegir sartenes y cuidar de ellas… nunca pensé que el tema diese para tanto! 😛 Espero que os haya parecido interesante, pero sobretodo útil a los que teníais dudas sobre el tema.
Si tienes experiencia con algún tipo de sartén diferente y quieres usar el espacio de los comentarios para contarlo, no dudes en hacerlo! Tanto al resto de lectores como a mí nos encantará conocerla.
Gracias por leer,
Muy buenos consejos. Guaiiii
gracias Miguelón! Besos!
Guaiiii
muchas gracias!! súper útil y lo comparto con mis contactos!
Me alegra que te guste, Casandra, y mil gracias por compartir el post con tus contactos! 🙂 Un abrazo!
Mil gracias Raquel por el post tan explicativo. Tengo que reconocer que a pesar que me gusta la cocina no presto mucha atención a la hora de elegir una sartén, pero ahora con los consejos que das me fijaré más. Además los enlaces que nos das tienen muy buen precio 🙂
Una pregunta, ¿si en el lavavajillas uso el jabón de lavar los platos a mano también se estropean?
Hola Laura, gracias por tu comentario. Respecto a tu pregunta, no tengo respuesta porque yo nunca lo he probado. De todas maneras, yo no me la jugaría, limpiar una sartén a mano no cuesta tanto y así te aseguras de que te dura años 😉 Un abrazo y gracias de nuevo por pasarte por aquí! 🙂
Yo tengo una sarten de acero inoxidable y no me se hacer con ella, es una pena porque es tan bonita.
¿Qué diferencia hay entre una sarten de ceramica y una antiaderente?, ¿cual dura más?
Hola Manuel, en el texto lo tienes explicado, el recubrimiento de una sartén anti adherente puede ser de telón o cerámica, así que una sartén de cerámica es anti adherente 🙂 échale de nuevo un vistazo al texto y a los enlaces que os pongo donde tienes información más específica sobre sartenes de cerámica. Un saludo!
Súper útil! Muuuuuchas gracias! 😀 Algún consejillo para las sartenes tipo Wok? Quiero una pero no sé qué es lo mejor o en que me tengo que fijar.
Gracias de ante mano 😉
Saludos!
Hola! pues la verdad es que no uso el wok, así que no te puedo ser de mucha ayuda. Lo mejor es que vayas a una tienda especializada en cocina y te dejes asesorar allí. Un saludo y gracias por preguntar! 🙂 Raquel